29 jun 2010

Huelgas y metros

Siempre ha habido clases.

Están los que se resignan ante la bajada de sueldos, y están los que se ponen en huelga para protestar. Estos últimos han decidido que valen más que nadie y que a ellos no se les baja el sueldo. Que ellos están por encima. Estos últimos son los trabajadores de metro que han decidido que ni siquiera van a respetar los servicios mínimos. Cosa que, para empezar, es ilegal. Con razón salían ayer escoltados los conductores...

Pues, ¿sabéis qué? con la cantidad de paro que hay ahora mismo, echaba a la puta calle a todos los que están secundando la huelga de metro. Para que se lo piensen mejor la próxima vez.

Que ojo, me parece estupendo que protesten por la bajada de sueldo, que para eso tienen derecho a huelga. Pero que respeten los servicios mínimos, que las leyes están para algo. Y que piensen un poco... que no son los únicos afectados por la bajada de sueldos, la subida del IVA y las demás medidas brillantes del señor Rodríguez.

Ay... así va el país. El día menos pensado, nos devuelven a África. O dinamitan los Pirineos y nos dejan en medio del Atlántico... donde no molestemos mucho.

11 jun 2010

Nordrhein-Westfalen, Bezirksregierung Düsseldorf

Ayer me enteré de que mi plaza de Auxiliar de conversación para el próximo curso es en Alemania.
Esta mañana me he enterado de que es a la misma zona que fui el año pasado de Erasmus, al Nordrhein-Westfalen (NRW). Y más en concreto, al distrito de Düsseldorf. Eso significia que, de aceptar, probablemente el año que viene viviré en Düsseldorf.

Visitantes bienvenidos =)

6 jun 2010

Técnicamente licenciada

Acabo de ver en el Facebook las fotos de la graduación de una amiga, que conocí el año pasado de Erasmus. Y me he puesto a hablar con ella, porque la he visto muy guapa, y para preguntarle que cómo le va.
Y entonces, ella me ha preguntado que cómo me va a mí... Y ha sido entonces, solamente entonces, cuando me he dado cuenta de que ya sabía la nota que me faltaba. De que ya estoy técnicamente licenciada.

3 jun 2010

Contra la amistad. El día que te merezca

El día que te merezca seré una persona increíble. El día que te merezca seré, de lo bueno, lo mejor. Me admirarás casi tanto como yo te admiro, me envidiarás casi tanto como yo a ti hoy. Los pajaritos se dejarán de cantar babosadas, las nubes se levantarán cachondas perdidas y las vírgenes suicidas abandonarán sus dos vocaciones de un polvazo y sin dilación. Todo eso el día que yo te merezca, todo eso el día que tú te merezcas algo como yo.

El día que te merezca habré hecho tanto por ti como lo que tú ya has hecho por mí. Poner cara de que estás conmigo cuando nadie más lo está. Y ponerla hasta partírtela si hace falta por cualquier tontería indefendible que se me caiga de la boca. Hacer ver que tengo razón aún cuando ya hace rato que me la quitan de las manos, oiga. Y aflojármela un poco cuando ya hacía tiempo que se me estaba atragantando. Nuestra amistad dará por fin balance cero, pero un cero con muchos unos a su izquierda y bien relleno de aparentes sobras, como todo buen relleno.

Y es que el día que te merezca, al resto del mundo, que le den. Esta sensación de no llamarte ni oírte ni verte lo suficiente no creo que desaparezca, pero como mínimo tendré claro que a ti también te compensa.

Ya sé que nada cambiará demasiado por tu parte el día que te merezca. Seguirás sin exigir tu cambio, como hasta ahora. Seguirás al otro lado de mis cosas, como hasta siempre. Con la distancia prudencial del que viaja todo el trayecto por el carril de al lado, exactamente a la misma velocidad, seguramente hacia cualquier destino menos el mío. Pero mira, igual para entonces ya me siento mejor, por estar dando a la altura de lo que llevo recibiendo durante todo este tiempo.

Mientras tanto, tendrás que conformarte con lo que hay. Mientras tanto, tendrás que perdonarme si sigo siendo fecha en tu calendario, inversión al cero por ciento de interés, llamada perdida de tanto en tanto que te recuerda que tenemos que quedar, y ese encuentro esporádico con todas las garantías de poder retomar las cosas justo en el punto donde las dejamos.

Ahora que lo pienso, es difícil que llegue el día en que te merezca. La entropía no deja de ser la religión de la naturaleza, la asimetría, su liturgia, y lo natural, este equilibrio caótico entre cosas muy desequilibradas que tienden a desordenarse juntas. Y las personas, las relaciones, las amistades y hasta las cosas más descojonantes, como la pareja, representan equilibrios jodidamente inestables, imposibles, contradictorios… aunque necesarios.

Corte al final de mi película favorita. Un tipo va al psiquiatra y le cuenta, oiga, mi amigo cree que es una gallina. Y el psiquiatra le pregunta y por qué no me lo trae. El hombre contesta, no puedo, necesito los huevos.

A lo que iba.

El día que te merezca te llamaré amigo.

El día que te merezca, te llamaré.

[Risto Mejide]

2 jun 2010

Supervivientes. La Jungla Urbana.

Me gusta el metro de Madrid, las cosas como son.
Creo que es, en general, un medio de transporte rápido y efectivo.

Pero me río yo de las personas que se van al programa Supervivientes, a vivir una experiencia única, a descubrir dónde están sus límites y blah blah blah.

Que se metan en el metro a las 8 de la mañana. Por ejemplo, en la línea 10. Vale, no es una experiencia única, se puede vivir a diario... pero si eso no es supervivenvia... y si con eso no desarrollas ingenio, equilibrio, paciencia... Incluso desarrollas habilidades de desaparición parcial de tu cuerpo (o desaparece parte de tu cuerpo o no me cabe en la cabeza cómo cabe tanta gente en tan poco espacio).

Eso sí, tiene sus ventajas... el efecto sauna es inmediato y de regalo con cada viaje.